La gente parece entrar en la vida en grupo, basado en el karma compartido y apegos emocionales. Las parejas a menudo vuelven a juntarse y las unidades de toda una familia pueden repetirse. Cuando un individuo reencarna, otros miembros del grupo kármico de esa persona estarán presentes. La identificación de los miembros del grupo kármico de la persona es otro criterio útil para establecer uniones en vidas pasadas.
Ian Stevenson hizo un estudio muy importante en gemelos en el que las vidas pasadas de 31 pares de gemelos fueron validadas. En el 100 por ciento de estos casos, los gemelos tuvieron relaciones significativas de vidas pasadas. La relación mas común en vidas pasadas es la de los hermanos, seguida por las amistades, luego, de ser esposos en la encarnación anterior. El estudio de los gemelos de Stevenson representa una evidencia sólida de que las almas planean vidas para volver a reunirse con sus seres queridos a través de la reencarnación.
¿Cómo nos conectamos con nuestros grupos kármicos? La respuesta, al parecer, es el destino. En el análisis de los casos de vidas pasadas, se observa que tenemos un destino predeterminado o itinerario de vida que nos lleva a las personas con las que se supone que debemos pasar el tiempo.
Para entender mejor cómo funciona el destino, vamos a usar la analogía de un viaje. Piense en su vida como unas largas vacaciones que planea por adelantado.Usted decide a quién quiere y necesita ver, adónde quiere ir, y en qué actividades le gustaría participar.